Lunes marrón, canta Sabina.

17/06

Desde la otredad/

Lunes. Comienza la semana con cara de perro.
La calle está trasbalsada. Atascos, bocinazos, empujones, miradas contrarias, gestos ariscos. Será porque no estoy en mi barrio, donde los lunes son un domingo laboral y nada mas.
Estoy fondeado en un café de l’Eixample, esperando que el doc de mi moto le cure el ojo trasero, mal llamado luz de freno.
Dicen en las películas americanas que por los zapatos descubres el nivel económico y social de la gente. De la gente no lo sé, de los barrios seguro. Andan aquí los pasos en limusinas de marca, y no caminan, se deslizan.
Los que piden, no lo hacen para el vino atorrante disfrazado de bocata, ni para el hambre de sus niños. Aquí piden para la Cruz Roja.
Pasan dos ejecutivos con el paso bien calzado y sus vasos de Starbucks Coffee, claro. Pasa un caniche gigante recién salido de la peluquería, con sus rizos perfumados y secados al brushing. No es que este barrio sea exageradamente pijo, es que el mío es exageradamente inmigrante y popular.

Ahora, con la moto curada, con sus ojos bien puestos y abiertos, iluminando el mundo, canta Bebe, y ya en casa, con las ventanas también abiertas.
Cuaderno de bitácora:
La semana se acomoda a proa y el sol se acerca al cenit. Vientos racheados del noroeste a lo largo y ancho de mi casa, listo para navegar.
Las cortinas respiran. Despegan del suelo, se inflan como una vela panzona con buena mar, para finalmente reventar y abrirse en dos gajos, dos alas batientes, que incitan a volar, rumbo al sur de tu corazón.
Buen lunes y buenos vuelos a todos, todas!

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s