Déjà vu

24/08

Desde el Bahía do Porto Mar /

El cielo se ha llenado de presagios, queda así el alma liberada y puede recostarse indolente al filo de las horas, como ese perro que se echa a mi lado y bebe las sombras de ese árbol.
Lleva el barrio el paso cansino y la mirada ausente, perdida en otro tiempo, como la de algunas fotografías antiguas, que se quedaron mirando la vida que ya no está.

Tiene este instante, tantos minutos, tantas horas, tantos días acumulados, habitándolo respirándolo, que el tiempo se le desborda, cae y se hace añicos. Esos trocitos pequeños de los años que vamos viviendo, me dice mi vecino murciano.
Tiene esta tarde el sabor de otras tardes, de otros barrios, de otros veranos.
De otra vida que también viví.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s